PROBANDO Y EXPERIMENTANDO CON EL PLÁSTICO MÁGICO o SHRINK PLASTIC

Cuando compré este plástico me pareció una idea muy maja para hacer colgantes personalizados para regalar, como el que hicimos aquí para regalar el día del padre. 

Lo hice calcando el dibujo que mis peques habían hecho sobre el plástico blanco (no me fié mucho de lo que venia en la propaganda, que se podía imprimir sobre el plástico con la impresora de inyección de tinta).

Pero se acercó el cumpleaños de mi sobrina y me quedaba sin tiempo, y lo hice imprimiendo una imagen sacada de internet.

Y así ha quedado.

La imagen se fija al plástico muy bien, luego hay que hacerle un agujero en la parte dónde vamos a poner la arandela para usarlo como colgante, y lo metemos en le horno a 175º unos 7 min. aprox. Lo aplanamos un poco, y ya está (el plástico se encoje y endurece unas 7 veces). 

Me gustó mucho el resultado, así que compré del plástico mágico pero el transparente. Después de lijar la parte en la que iba a ir el dibujo, probé a imprimir la imagen. El resultado no ha sido tan bueno. No se fijó la tinta, así que tocó limpiarlo muy bien y calcar el dibujo con rotulador indeleble.

Y así quedaron.

El botón  es un mandala sacado de internet, coloreado con rotuladores normales. 

Creo que me gusta más el resultado con el plástico blanco.

Aquí he encontrado alguna información básica sobre este plástico mágico. 

Apunte mental; hay que intentar que no quede ninguna manchita o borrón porque al encoger el plástico, los colores se marcan más, y las minimanchitas se notan.

Nos vemos.